Fertilidad: la columna vertebral de una ganadería de cría

En ganadería, no hay muchos atajos. Puedes tener genética de primer nivel, instalaciones modernas y un manejo impecable, pero si tu hato no es fértil, simplemente no hay negocio.

La fertilidad es la columna vertebral de cualquier programa de cría. Y en el Angus, una raza reconocida por su eficiencia reproductiva, esto cobra aún más relevancia.

Diagnóstico de preñez por ecografía Ganadería San Ángel.

¿Qué es realmente “buena fertilidad”? 

Es fácil pensar que se trata solo de preñar vacas, pero es mucho más que eso. Una vaca fértil:

• Se preña rápida y fácilmente.

• Tiene un intervalo parto-concepción corto.

• Cría terneros sanos y vigorosos cada año.

• Vuelve al ciclo reproductivo rápidamente después del parto.

  
  

Y un toro fértil, claro está, debe cumplir con pruebas de fertilidad, tener buena líbido, circunferencia escrotal (volumen testicular) adecuada y una estructura que le permita trabajar eficientemente (realizar la monta).

¿Por qué es tan importante?

Porque la fertilidad impacta directamente en la rentabilidad. Cada vaca que no se preña a tiempo es un tiempo perdido de producción. Y cada día adicional sin un ternero al pie, es dinero que dejas de recibir.

En una ganadería de cría Angus, donde la meta es producir animales superiores para la venta o reposición, no puedes darte el lujo de tener servicios no efectivos. 

¿Qué factores influyen en la fertilidad?

Este tema es largo, pero aquí van los más relevantes:

• Condición corporal: Ni gordas ni flacas. Las vacas deben llegar al servicio en buena condición (idealmente 3.5) para tener ciclos regulares y ovular a tiempo.

• Manejo nutricional: La alimentación antes, durante y después del parto define mucho más de lo que creemos. Una dieta balanceada en proteína, energía y minerales es clave.

• Salud reproductiva: Revisión veterinaria, ecografías, control de enfermedades reproductivas y planificación sanitaria rigurosa.

• Edad y genética: La selección por fertilidad funciona. En nuestra ganadería, observamos de cerca la edad al primer parto, la capacidad de retorno al celo y la longevidad funcional.

•  Manejo del toro: Cuando se maneja monta natural es importante saber que de un toro puede depender todo el resultado reproductivo de la finca. Este debe estar en óptimas condiciones físicas y sanitarias, tener líbido alta y estructura funcional para trabajar.

¿Cómo mejorarla?

Con datos. Con observación. Con paciencia...

Registrando servicios, partos, pesos al nacer, condición corporal. Evaluando tasas de concepción, haciendo palpaciones a tiempo. Y sobre todo, siendo exigentes con las vacas y con uno mismo.

Una vaca que no quedó preñada con dos servicios seguidos no puede quedarse por “bonita” o “mansita”. Porque aquí se trata de productividad, no de simpatía.

En resumen:

La fertilidad no es solo un dato más: es el corazón que impulsa el motor de la ganadería de cría.

En Ganadería San Ángel lo entendemos así, y por eso seleccionamos hembras que paran cada año, que ciclan temprano y que crían terneros fuertes y funcionales. Porque sin fertilidad, no hay futuro.

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